Si me preguntáis la primera palabra que me viene a la cabeza si escucho la palabra "Londres" os contestaré: suciedad.
Las aceras, los metros, casi todo está lleno de basura y periódicos pisados. También está lleno de contenedores desbordados de basura cada cuatro pasos. Esto tiene una razón bien sencilla: aquí la basura se recoge una vez a la semana (en Winchester, de donde es mi compañero, recogen una vez cada dos semanas). Por eso, si caminas por la calle, ves un contenedor casi por cada casa. Cuando llenas tu cubo de basura, la desocupas en el contenedor de la calle. A mí me parece una guarrada impropia de un país del primer mundo tan rico. No entiendo como pueden pagar tantos impuestos y tener una mierda de transporte y un servicio de recogida de basuras propias de principios del siglo XX.
Sigo diciendo que en España estamos mucho mejor en casi todo excepto en trabajo.
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